La situación de pandemia nos ha hecho ver muy claro que seguir unas normas de higiene nos ayudan a proteger nuestra salud y la de los demás. Hemos tenido tiempo más que de sobra para comprobar no todos los productos de limpieza o de higiene causan el mismo efecto o son capaces de acabar en su totalidad con virus o bacterias. En el caso de aquellos productos que cuentan con antibacterial additives, no es así, ya que están formulados de tal manera para que son capaces de acabar con la práctica totalidad de microorganismos que pueden dañarnos. En estos casos, la salud y la protección adquieren una importancia máxima. Gracias a este tipo de aditivos, se puede ver la diferencia entre el producto de limpieza estándar, que quizá se disfraza bajo un olor agradable, de otro que sea realmente efectivo y que está protegiendo de manera extraordinaria nuestra salud.
¿Qué son los aditivos antibacterianos?
Son una serie de compuestos que, incorporados a punto de limpieza a elementos como textiles o algunas superficies, son capaces de inhibir el crecimiento de las bacterias o, en algunos casos, eliminarlas por completo. Aquí conviene hacer la diferenciación entre los aditivos bacteriostáticos y los bactericidas. Los primeros se encargan de evitar el crecimiento de las bacterias, de tal forma que sean incapaces de seguir reproduciendo y evitando focos de contaminación. En el caso de los bactericidas, se produce una eliminación total de las bacterias que pueden llegar a dañarnos.
El secreto del éxito de los antibacterianos es que atacan directamente la pared celular o son capaces de modificar el ADN de la bacteria para impedir su desarrollo. Incluso son capaces de eliminar la fuente de alimentación de las bacterias, las proteínas, para evitar que estas siguen desarrollándose. Estos aditivos son de última generación y ayuda notablemente a evitar que se produzcan contaminaciones.
Existe una variante de aditivos antibacterianos que están formulados a base de plata, estos son capaces de tener una eficacia mayor y de conseguir que se evite la reproducción de bacterias y de virus. Probablemente, no haya aditivo más efectivo que los que están basados en este metal. Además, gracias a una tecnología de última generación, este aditivo antibacteriano a base de plata se va liberando poco a poco, por lo que la efectividad que se consigue es mucho mayor. No solamente ganamos a la hora de proteger nuestra salud, sino que las personas alérgicas cuenta con un fantástico aliado que les ayudará a estar bastante más tranquilos.
La protección que se ofrece es máxima, por lo que puedes asegurarte que todas las superficies tratadas con este tipo de aditivos permanecen limpias durante más tiempo, evitando riesgos para nuestra salud. Quizás una de las virtudes más reseñables de este tipo de antibacterianos no es solamente su capacidad de mantener cualquier entorno limpio, sino que pueden ser incorporados a una gran gama de productos y aplicarse en muchas superficies. Por ejemplo, en encimeras de cocina o en sanitarios. Solo así se puede conseguir una desinfección prolongada que nos ayude a ganar en tranquilidad, ya sea para los miembros de nuestra familia o para nuestros clientes.
Es lógico miedo que nos ha dejado la pandemia sigue estando latente en todos los ámbitos de nuestra sociedad. Por eso, confiar en buenos productos, capaces de mantener a raya a las bacterias y los virus, es la única manera de que consigamos ganar en tranquilidad y de protegernos. Con la salud no se juega y, por tanto, ahora tienes a tu disposición unos aditivos que favorecen la creación de entornos higiénicos y que se encuentran libres de bacterias y virus.