En esta temporada de verano, a muchas personas les provoca ir a la piscina a disfrutar del sol, 
pero hay que tener en cuenta los peligros que hay en ellas y que pueden perjudicar nuestra salud.
Muchas veces las personas no toman conciencia de que antes de ingresar y después de salir de una piscina deben bañarse y tener necesariamente higiene minuciosa, esto es necesario para evitar trasladar bacterias al agua.
Algunas de las enfermedades más comunes que uno puede contraer al ingresar a una piscina en pésimas condiciones de higiene son:
• Dermatitis atópica (alérgica), se produce por el agua contaminada. Esto ocurre cuando alguna bacteria fecal se mezcló con el agua.
• Hongos en los pies, siempre donde hay humedad hay presencia de hongos. Esto puede producirse cuando la ducha no está bien desinfectada, para esto siempre debemos utilizar sandalias y toallas propias.
• Conjuntivitis, es una infección a los ojos, esto se debe a que a veces las piscinas contienen mucho cloro. Para esto, lo mejor es utilizar lentes de piscina. Esta enfermedad es contagiosa.
Otros peligros que pueden ocurrir son:
• Riesgos de caídas por las losetas.
• Tener en cuenta que entre las losetas se acumula el sarro llamado limo, por eso es obligatorio lavar bien las losetas.
• Tener en cuenta que el agua turbia también es un peligro para la salud de las personas.
Las recomendaciones que debemos seguir son muy fáciles y necesarias:
• Utilizar los implementos como sandalias, toallas propias.
• Utilizar lentes de piscina para prevenir los ojos del cloro.
Cuando presentamos alguna de las enfermedades ya mencionadas, debemos recurrir al doctor (dermatólogo), si lo que está afectado es la piel; o al oftalmólogo, si tenemos conjuntivitis.