Cocinar es una actividad que necesita tiempo y dedicación, lo que hace que en algunas ocasiones, sea algo pesado y monótono, sobre todo si se trabaja a tiempo completo y se llega a casa con pocas ganas de preparar los alimentos.
Pero esto ya no tiene que ser un problema gracias a la tecnología. Un dispositivo que todos deberían tener en casa es una olla programable, un robot que ha revolucionado el arte culinario, convirtiendo esta tarea en algo sencillo y práctico. Solo basta con programarla y ella hará el resto.
Principales atributos de las ollas programables
Ahora no es necesario pasar horas en la cocina gracias a este increíble dispositivo. Tener una olla programable puede sernos de gran ayuda, ya que es un equipo multifuncional, es decir, que tiene la capacidad para realizar 19 diferentes funciones, tales como hornear, freír, sofreír, fermentar, confitar, escalfar, guisar, dorar, cocer a vapor, cocer a presión, fuego lento o turbo, entre otras.
La maravilla de esta olla es que permite hacer innumerables recetas sin ningún esfuerzo, solo se requiere introducir los alimentos, programar la función y dejar que ella haga todo el trabajo. Incluso cuenta con una navegación guiada por voz que avisa cuando la comida está lista para servir.
Algunas tienen una pantalla LED ligeramente inclinada, lo que hace más fácil su uso. En ella se puede visualizar el tipo de menú seleccionado y la temperatura programada, que va desde los 60°C hasta los 200ºC. También se detalla el ajuste de la presión, que puede llegar hasta los 90 kp, y un reloj numérico que indica en qué tiempo estipulado estarán los alimentos.
Otras funciones a destacar
Una olla de este tipo forma parte de la era verde, con un botón ecológico que al activarlo, disminuye por lo menos el 50% del consumo eléctrico y aumenta la capacidad antiadherente. Si se mantiene este mismo botón pulsado por varios segundos, ofrece la configuración del idioma, del que se puede elegir entre español, inglés, alemán, italiano, portugués y francés.
Lo más importante es que posee un sistema inteligente que es capaz de medir la cantidad y el tiempo de cocción de los alimentos, cálculo que hace posible una comida hecha a la perfección. Incluso dispone de una memoria eProm, que evita la desprogramación por si ocurre un fallo eléctrico.
Por último, la cubeta es la protagonista de las ollas programables, ya que está confeccionada con cerámica recubierta de piedra marmórea, que permite distribuir de manera uniforme la cocción de los alimentos. A su vez incluye una báscula que precisa el peso o el volumen de los ingredientes a procesar.
Los accesorios aumentan la utilidad
Los complementos que contiene una olla programable hacen de ella el utensilio más imprescindible de la cocina. Algunas incluyen una cestilla freidora, para hacer más simple la tarea de escurrir los alimentos después de freírlos, así como una rejilla para hornear galletas, panes, rosquillas y demás
Y la estrella de los accesorios es el acople cabezal del horno, que tiene la virtud de dorar y gratinar cualquier alimento que se encuentre en la cubeta. Tiene mandos independientes que programan la temperatura y los minutos de la función seleccionada.
Finalmente, otros modelos cuentan con una tapa de acero inoxidable con una goma para contener la presión y las fugas, lo que se integra de manera segura con una válvula de presión. Aparte disponen de un contenedor que recolecta el excedente de líquido producto de la evaporación, que puede ser vaciado fácilmente. Y lo más práctico, es que traen un manual de uso que a su vez es un recetario.
¿Qué modelo escoger?
Existen en el mercado una gran variedad de ollas programables marca GM, que varían por su cantidad expresada en litros, algunas funciones, y su precio.
Entre las más destacadas se pueden mencionar:
- GM H Ovall.
- GM Modelo D.
- GM H Deluxe.
Sea cual sea el modelo que se elija, es importante seleccionar el mejor asistente de cocina que se adapte a las necesidades de cada cliente, y lo más importante, que haga más fácil la tarea de cocinar. Muchos de estos dispositivos se pueden adquirir a través de una tienda online.