Dietas baja en carbohidratos, bajas en calorías, la dieta de la sopa de col, la dieta de la alcachofa… son muchas las dietas que prometen hacerte perder peso rápidamente. Y la gran pregunta es ¿funcionan las dietas milagro? La mayoría hacen perder mucho peso rápidamente, pero una vez finalizadas se recupera mucho más peso del que se perdió. Pero lo peor de estas dietas no es esto, sino que muchas no se basan en la ciencia o en la investigación, prescribiendo regímenes que no son en absoluto saludables.

 

Te damos cinco razones para evitar las dietas de moda, aunque podríamos darte muchas más.

 

1. Algunas dietas pueden hacerte daño
Las dietas de choque son aquellas que están orientadas a reducir drásticamente el número de calorías que consumes.  Estas dietas pueden hacer que te sientas enfermo e incapaz de funcionar correctamente. Debido a que son nutricionalmente desequilibradas y muy restrictivas, pueden provocar a largo plazo problemas de salud.

2. Excluir alimentos es peligroso
Algunas dietas recomiendan cortar totalmente el consumo de ciertos alimentos, como la carne, el pescado, el trigo o los productos lácteos. Eliminar ciertos grupos de alimentos podría impedir la obtención de los nutrientes y vitaminas que tu cuerpo necesita para funcionar correctamente.

3. Las dietas bajas en carbohidratos pueden ser altas en grasa
Algunas dietas, como la dieta Atkins, son muy bajas en hidratos de carbono (como la pasta, el pan y el arroz), que son una fuente esencial de energía. Estas dietas bajas en carbohidratos pueden provocar efectos secundarios como dolores de cabeza, mal aliento y estreñimiento. Además, su alto contenido en grasas puede resultar perjudicial para las personas con el colesterol alto o con problemas cardiovasculares.

Los defensores de este tipo de dietas sostienen que la ingesta alta de proteínas reduce la sensación de hambre, lo cual es una realidad. Pero muchas de ellas permiten comer alimentos ricos en grasas saturadas, como la mantequilla, el queso y la carne, y demasiadas grasas saturadas pueden aumentar los niveles de colesterol en sangre y el riesgo de padecer enfermedades cardíacas.

4. Las dietas de desintoxicación no funcionan
Las dietas de desintoxicación se basan ??en la idea de que las toxinas se acumulan en el cuerpo y pueden ser eliminadas por comer o no comer determinados alimentos. Sin embargo, no hay evidencias de que las toxinas se acumulen en nuestros cuerpos de la forma en la que estas dietas lo sugieren ya que, si lo hicieran, nos sentiríamos muy enfermos.

Las dietas de desintoxicación pueden producir una pérdida de peso debido a la restricción calórica que conllevan. Pero no funcionan. Son una especie de forma de ayuno que tiene más inconvenientes que ventajas.

5. La dieta de la sopa, la del grupo sanguíneo y otras dietas de moda no tienen ninguna base científica
Algunas dietas de moda se basan en comer un solo alimento o comida, como la sopa de col o alimentos crudos. Otros hacen afirmaciones increíbles como, por ejemplo, que no puedes comer determinados alimentos según el grupo sanguíneo que tengas.

Lo habitual es que estas dietas tengan poco o ningún respaldo científico para apoyar sus aseveraciones. Seguir este tipo de dietas durante un tiempo prolongado sólo produce desequilibrios y graves perjuicios para la salud. Es posible que pierdas algo de peso rápidamente, pero es mucho más sano y seguro perder peso poco a poco conservando la salud.