El rostro es la parte del cuerpo a la que le dedicamos más cuidados e importancia. Las manchas son consecuencia de envejecimiento, accidentes, exposición al sol o procesos naturales como la pubertad o el embarazo. Si tienes manchas no te pierdas los siguientes remedios caseros para eliminarlas y mostrarle a la vida tu mejor cara.
No te escondas más
Las manchas en la piel son comunes y pueden deberse a múltiples causas. La exposición solar, el uso indebido de productos, enfermedades, envejecimiento, acné, embarazo… Son un problema que tiene solución si aprendemos a lidiar con ellas y a asesorarnos con expertos en el área dermatológica como por ejemplo la clínica estética en Madrid de Cristina Alvarez, para que puedan diagnosticar sus causas para aplicar las mejores soluciones.
Las manchas en la piel la mayoría de las veces pueden ser evitadas y la prevención es cuando mucho la mejor cura. Si ya presentas pigmentaciones irregulares y te escondes tras capas de maquillaje es cuestión de que te atrevas a dar el paso y no des cabida a complejos que te cohíban de exhibir tu belleza de manera plena.
Lo primero es el diagnóstico
Una vista al dermatólogo es esencial para determinar el tratamiento a seguir, pero siempre es útil potenciar el proceso de curación con recetas simples que puedes preparar con ingredientes presentes en tu despensa. Consulta siempre a tu médico y haz pruebas en zonas como tus muñecas para descartar alergias.
Remedios caseros para eliminar las manchas del rostro
- Jugo de limón. Exprimir medio limón en un recipiente, aplicar directamente en las áreas manchadas y dejar actuar toda la noche. Enjuagar en las mañanas con agua fría. Puedes complementar con yogurt, leche o bicarbonato de sodio en una pasta ligera.
- Puré de papaya: debido a su alta concentración de carotenos y enzimas, esta deliciosa y nutritiva fruta regenera, exfolia y aclara la piel de forma natural. Tritúrala cuando esté bien madura y aplícala de forma local sobre las manchas.
- Vinagre de manzana
- Empapa algodón con vinagre de manzana y aplícalo sobre las manchas. Funciona como un astringente y aclara de forma natural. Diluye en agua si tienes piel sensible.
- Compensas de leche. El ácido láctico arrastra las células muertas de la superficie de la piel nutriéndola y renovándola. Empapa un algodón en leche o suero y aplícalo en las zonas manchadas. Déjalo actuar toda la noche y enjuaga al día siguiente.
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